Paso 1. Prender el horno a 160° y dejar que tome temperatura. Mientras, mezclar en un recipiente alto y ancho la harina de quinua y la mitad de harina de trigo y el azúcar.
Paso 2. Diluir la levadura en agua tibia con la sal. Derretir la manteca. Hacer un hueco en el centro de las harinas, y agregar la levadura, el huevo y la manteca e ir revolviendo con un tenedor, incorporando de a poco la harina de los costados.
Paso 3. Tapar el recipiente con un repasador seco y colocarlo sobre la cocina que estará muy cálida y ayudará a que la levadura haga su proceso.
Paso 4. Pasada casi una hora cuando levante bastante, agregar en tres tandas la harina de trigo restante, colocándola alrededor de la masa y mezclándola apenas con las manos, incorporando la harina suavemente con movimientos desde afuera hacia adentro, cuidando que no se seque demasiado, el secreto es hacer una masa blanda y consistente.
Paso 5. Dejar levantar nuevamente otros 50 minutos sobre la cocina. Volcar en un molde enmantecado directamente del recipiente donde descansó, sin darle forma ni manosearla, acomodar apenas un poco en las puntas del molde con los dedos humedecidos. Salpicar por arriba con pepitas de tomate. Llevar al homo a 160 grados durante 45 minutos.
Paso 6. Apagar el horno y dejar el pan dentro 10 minutos con la puerta abierta (no más para que no se seque). Retirar y dejar enfriar.