Mezcle todos los ingredientes; si la masa se mantiene muy seca, agregue un poco de agua o leche diluida hasta formar una pasta compacta.
Moldee los pancitos de forma circular, no muy grandes, hornéelos a temperatura moderada hasta que estén dorados.
Cuando amasa demasiado la harina y las grasas (mantequilla, manteca o aceite), resulta una masa flexible y elástica. El horno muy lento no seca adecuadamente a la masa. Use solamente el agua necesaria para mezclar los ingredientes. Amase ligeramente y con rapidez y tendrá buenos resultados en sus preparaciones.