- Colocar el dulce de leche en una manga y rellenar las ciruelas secas.
- Fundir el chocolate con leche hasta alcanzar entre 45 y 50 °C. Para templarlo, colocarlo sobre un bol con agua fría y hielo. Remover. Llevar al calor unos segundos y medir la temperatura: debe estar a 29 °C. Tomar cada ciruela con un tenedor y sumergirla dentro del chocolate templado. El chocolate debe cubrir toda su superficie.
- Retirar y escurrir el excedente. Dejar enfriar las ciruelas bañadas a temperatura ambiente sobre papel manteca.
- Derretir el baño de repostería blanco a baño María.
- Cargar una manga con el baño de repostería blanco. Decorar las ciruelas bañadas con hilos de chocolate. Dejar enfriar a temperatura ambiente.
Consejo: Presentar estas ciruelas en moldes de papel o pirotines de distintos colores en tonos pastel.