Disolver la levadura en poca leche tibia y luego amasar todos los ingredientes juntos.
Tapar la masa y dejarla leudar a temperatura ambiente (20 a 22 °C) durante una hora.
Cortar la masa en trocitos del tamaño que se prefiera, dar forma de bollitos redondos u ovalados y pincelarlos con leche o crema de leche.
Dejarlos leudar otros 20 minutos.
Llevar los pancitos de leche al horno y cocinarlos a 200 °C durante 20 a 25 minutos.
Para darles un toque especial: saboriza la masa de los panes con trocitos de nuez o pasas de uva. También puedes espolvorearlos con, semillas de sésamo.