- 200 g de almendras peladas
- 150 g de azúcar impalpable
- Esencia de vainilla, cantidad necesaria
- 100 g de claras
- 1 pizca de sal
- 50 g de azúcar
Tostar 100 g de almendras en el horno a 150 °C durante unos 10 minutos. Una vez tostadas, picarlas groseramente y reservar.
Procesar los otros 100 g de almendras y reservar.
En un bol, mezclar las almendras trituradas y picadas, el azúcar impalpable y un chorlito de esencia de vainilla.
Montar a nieve las claras con la pizca de sal y, poco a poco, ir agregando el azúcar hasta lograr un merengue.
Mezclar los ingredientes secos con el merengue con movimientos envolventes y delicados (para que no se baje el batido).
Tomar porciones de la mezcla con una cuchara sopera y colocarlas sobre una bandeja para horno con papel manteca (deben estar separadas unos 8 cm).
Llevar a horno precalentado a 150 °C durante alrededor de 30 minutos o hasta que estén ligeramente doradas.
Retirar de la placa y dejar enfriar sobre una reja para tortas o sobre un repasador.
Te paso un truco para saber si las claras están bien montadas y el merengue en su punto: da vuelta el bol y, si no se caen, ¡está perfecto! Recuerda también que hay 3 tipos de merengue; el básico, el italiano y el suizo. En este caso usamos el merengue básico.