1. Colocar el agua en una olla y llevar a hervir con las ramas de canela y los clavos de olor. Dejar hervir hasta que el agua cambie de color. Colocar el sésamo en una sartén al fuego, tostar ligeramente.
2. Luego vaciar el sésamo tostado a la olla de la canela, remover y dejar hervir unos minutos. Retirar del fuego y dejar enfriar.
3. Una vez que el fresco esté frío, colar el sésamo y trasladar a la licuadora, reservar el fresco, añadir parte del fresco y licuar por unos minutos.
Vaciar el licuado a la olla del fresco, remover y dejar reposar unos minutos.
4. Luego volver a colar las semillas unas dos veces y endulzar el fresco a gusto.
Servir bien frío.