1. Por una parte, ralle una libra de yuca cruda; por otra, separadamente, haga cocer media libra de yuca. Cuando esté a punto, muélala.
2. Mezcle todos los ingredientes hasta formar una masa. Dé forma a las arepas; pequeños círculos delgados, con las manos previamente impregnadas con manteca.
3. Ponga al fuego un tiesto, preferentemente de esos que se queman en la pampa. Cuando esto esté caliente, ponga en el las arepas. Antes de darles la vuelta, tiene que esperar a que estén doradas; caso contrario, se enduran. Sírvanse calientes.